Pipa era un simple pueblo de pescadores: accesible solo en barco, la gente vino a este paraíso para surfear a fines de la década de 1970. Hoy en día, puede reclamar el estatus de playa favorita de muchas personas por varias razones. Primero, los increíbles atributos naturales: agua cristalina, arena blanca, áreas de conservación, olas perfectas, temperatura ideal y acantilados de más de 10 m de altura que bordean toda la bahía. Y también los lugareños y su entretenimiento nocturno en las playas bailando forró, reggae y samba. Y luego estas increíbles playas y sus nombres evocadores: "Praia do Madeiro", "Praia do Amor" y "Bahia dos Golfinhos" ... Cereza en el pastel: la leyenda dice que no puede irse de Pipa sin ver un delfín!